viernes, 27 de febrero de 2009

Feudalismo

El feudalismo es la organización social, política y económica basada en el feudo que predominó en la Europa occidental entre los siglos IX y XV. Se trataba de terrenos cultivados principalmente por siervos, que daban parte de su producción al amo de las tierras.

Sociedad:

Existían clases sociales o estamentos: los que guerreaban, los que oraban y los que trabajaban.

Los Nobles: clase social muy alta, formada por un grupo privilegiado de guerreros y señores feudales.

- La nobleza guerrera: vivían en los castillos al servicio de un señor feudal y sus principales ocupaciones eran la guerra y los torneos de combate entre caballeros. Sus siervos les pagaban por el beneficio de sus tierras. Los caballeros eran de una clase social un poco menor que los terratenientes militares y religiosos, y se podía llegar a ella, gracias a algún mérito durante una guerra o combate.
- Los señores feudales: habían recibido tierras y tenían un gran poder. Cobraban impuestos por el uso de sus pertenencias, tenían sus propios tribunales de justicia, podían acuñar moneda. Vivían en castillos.
El Clero:
Dentro del clero se distinguían dos grupos diferentes:
- El clero secular: sacerdotes y obispos.
- Clero regular: monjes de órdenes religiosas dirigidas por un abad.
El clero estaba muy jerarquizado:
- El alto clero: obispos y abades. Pertenecían al mismo grupo social que la nobleza, eran auténticos señores feudales, poseían tierras y campesinos que prestaban sus servicios. Además, la Iglesia cobraba a los campesinos un impuesto especial llamado diezmo, que consistía en la entrega de la décima parte de sus cosechas.
- El bajo clero: sacerdotes y monjes. Procedían del campesinado.
Los monjes hacían votos de pobreza, castidad y obediencia, rezaban varias veces al día, ayudaban a los pobres, cuidaban a los enfermos, trabajaban la huerta.
Otras de las funciones importantes de la iglesia fue traducir, interpretar y archivar todos los libros de la época, lo que hizo que se transformaran en verdaderos centros de cultura. El idioma utilizado era el latín.

Los Campesinos: El 90% de la población medieval eran campesinos. Eran la clase social más baja de esta época, y se dedicaban a la cría de animales y a la agricultura. Cada familia producía lo necesario para vivir. Dependían de un señor feudal que los protegía en caso de guerra. Los campesinos también se unieron formando aldeas en el medio de grandes extensiones de campos. Eran muy pobres, y tenían casas de adobe y paja. Para garantizar su subsistencia eran también artesanos, trabajaban la madera, los metales, el barro, el cuero, etc. Sus productos eran usados en la producción agrícola y en la vida cotidiana.
- Campesinos libres: podían abandonar el feudo.
- Siervos: no podían abandonar el feudo.

El Contrato Feudal: El feudo era el beneficio o tierra concedida por un señor en premio de servicios prestados y con la obligación de prestar otros nuevos.
Un vasallo podía ser señor y vasallo a la vez ya que podía enfeudar parte de su feudo a vasallos de inferior categoría.
El Alodio era una propiedad completa. Los propietarios de alodios eran aquellos que habían recibido una herencia libre de toda obligación de todo tributo. A menudo estos propietarios se presentaban a algún jefe poderoso, y le recomendaban su alodio, a fin de que lo defendiese.
Así se estableció una jerarquía de propietarios, dependientes unos de otros.
El que iba a recibir la tierra se presentaba ante el señor feudal con las dos manos juntas, en señal de humildad, se arrodillaba y murmuraba unas palabras.
Obligaciones del vasallo:
Las obligaciones del vasallo eran de dos clases: morales y materiales.
Entre las morales figuraban la de guardar los secretos del señor, descubrirle las tramas de sus enemigos, defenderle, darle el caballo en las batallas si perdía el suyo, ocupar su puesto en el cautiverio si caía prisionero, respetar y hacer respetar su honra.

Las obligaciones materiales eran:
El servicio militar
La fianza u obligación de ayudar al señor a administrar justicia y prestar su brazo para hacer cumplir la sentencia pronunciada.
A estas obligaciones se añadían otras particulares, como la de servirse del molino, de la prensa y del horno del señor, mediante el pago de una cantidad determinada; darle parte de los frutos o prestarle un número dado de jornales.

Los castillos:



Los señores feudales vivían en castillos fortificados, que se levantaban a orillas de los ríos o en las cumbres de las colinas, y dominaban todos los caminos importantes.
Estaban admirablemente dispuestos para la defensa; en ellos se acumulaba cuanto era necesario para la vida y la tierra. Para entrar en el castillo era preciso primero atravesar el foso que lo rodeaba, por un puente levadizo y luego debía pasarse bajo la reja que protegía la puerta y que levantaban en tiempos de paz. A veces había murallas que encerraban en el castillo campos cultivados; de modo que los señores tenían allí su palacio y su campamento, todo un dominio provisto de las cosas más necesarias. Inmensos subterráneos servían de almacenes, prisión y asilo, según las circunstancias.

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